Amor por internet

Hoy en día, a menudo comienza con una pantalla. Nuestras conexiones rápidas e instantáneas han alterado drásticamente muchos aspectos de nuestra vida cotidiana, el mundo de las citas y las relaciones románticas entre ellos. Ya sea para bien o para mal, Internet, los teléfonos inteligentes y el crecimiento tecnológico en general han hecho que enamorarse en 2018 sea muy diferente de lo que debió ser en 1918.En aquel entonces, el círculo social de uno era mucho, mucho más pequeño. «Cortejar» era el término que se utilizaba para las citas, y el matrimonio generalmente se producía mucho más rápido. De hecho, la idea de «salir por ahí» era inaudita. En el último siglo hemos ganado mucha más libertad, elección y posibilidades, e Internet ha cambiado las cosas más que nunca. ¿Cómo podemos medir el impacto de Internet en nuestra vida amorosa, en cómo encontramos el amor y en cómo elegimos con quién salir o con quién casarnos? ¿Ha transformado Internet la forma en que nos enamoramos? Veámoslo más de cerca.

Amor por internet

No es de extrañar que Internet haya cambiado significativamente las citas en la era moderna. Aunque muchos de nosotros seguimos conociendo a posibles parejas en el trabajo, a través de nuestras aficiones o en nuestras comunidades, la popularidad de las citas en línea ha hecho que ésta sea una de las principales formas de iniciar relaciones. En lugar de hacerlo en persona, ahora nos relacionamos en línea.

Aun así, enamorarse es enamorarse. No es que nuestras reacciones biológicas y químicas sean diferentes hoy en día. Las reacciones en sí mismas no han cambiado, pero sí el camino que nos lleva a ellas.

Gran parte de nuestra evaluación inicial de un posible novio ya no tiene lugar cara a cara. En su lugar, hacemos juicios basados en fragmentos rápidos de información, fotos o basados en una "coincidencia" virtual. Esto puede significar que ahora pensamos más con la cabeza que con el corazón, o que miramos más críticamente a las parejas en lugar de dejarnos guiar por la pura atracción. O tal vez sea lo contrario: si hacemos "swipe a la izquierda" en una aplicación de citas, sólo nos guiamos por una medida rápida de las apariencias.

En cualquier caso, hay una sensación de que hay más peces en el mar cuando se trata de citas en línea. Ya no estás limitado a un pequeño grupo de potenciales parejas, sino que tienes una oferta casi ilimitada al alcance de tu mano. Un catálogo de amantes te espera, y tienes la oportunidad de examinarlo a tu antojo.

Encontrar el elemento humano

Las citas en línea pueden ser beneficiosas, siempre que las personas nos aseguremos de no descuidar el elemento humano. Esto significa dar prioridad a la personalidad y la compatibilidad por encima de la apariencia. Esto significa conocerse en persona y dar a las parejas potenciales una oportunidad real. Y esto significa pasar tiempo fuera de la red y en auténtica conexión cuando se pueda.

En general, es evidente que las citas online son algo bueno para nuestro mundo. La gente puede conectarse más fácilmente que nunca, lo que significa que muchos que no habrían encontrado relaciones de otro modo pueden ahora disfrutar del romance y la compañía con más facilidad. El crecimiento de las citas en línea también demuestra que, como pueblo, nos adaptamos cómodamente a los nuevos tiempos. El mundo está en línea, y nuestras relaciones también.

Hay muchos casos de "felices para siempre" en los que la gente ha conocido a su pareja por Internet. Basta con leer estas historias de amor real. Las conexiones y las relaciones requieren trabajo, independientemente de cómo se encuentren, pero nuestro acceso al mundo a través de la tecnología facilita el inicio de estas relaciones---- y, con suerte, la búsqueda del amor verdadero.