Cómo ligar sin morir en el intento
Este tipo de empresas de Internet han proliferado por la incesante necesidad de no sentirse solo. Pero no olvides tomar tus reservas. El objetivo es entretenerse, salvaguardando siempre nuestra integridad y dignidad humana.
La regla de oro es sentirse cómodo con tus romances virtuales
La diferencia entre un flirteo por ordenador y uno cara a cara es mínima. Tan precavido como cuando se conoce a alguien en el mundo real, hay que serlo en el ciberespacio. Es fundamental no enamorarse a la primera, sino agotar todas las instancias para conocerse. Después del encuentro virtual viene el presencial, no olvides que es el más significativo.
Para empezar, define bien cuál es tu propósito, es decir, qué tipo de relación buscas
Tenlo claro y exige claridad al otro. ¿Sólo sexo? Dilo con confianza y espera que el otro esté de acuerdo. Aunque se sabe de casos extraordinarios en los que la gente encuentra el amor de su vida a través de la red, no creas que será tu caso. Diviértete y si ocurre algo genial con alguien, todos saldremos ganando.
La mayoría de los servicios de citas online ofrecen búsquedas detalladas
Así que introduce toda la información posible sobre ti para recibir mensajes y solicitudes de las personas adecuadas. Es básico que te describas a ti mismo, pero sobre todo a quién buscas; tus intereses y aficiones, a qué aspiras en la vida y también lo que has conseguido. Sé creativo, auténtico y veraz: sé tú mismo. Nunca sabes cuándo acabarás conociendo a tu cita cara a cara, así que evita confusiones posteriores. Lo más embarazoso es conocer a alguien que resulta no ser lo que dijo, no sólo físicamente, sino también en los demás aspectos que más importan: personalidad, educación, cultura, círculo social, sentimientos, etc. Esto no significa que tengas que compartir datos personales desde el principio, sino hasta que te sientas lo suficientemente seguro.
Tu dirección de correo electrónico alternativa puede ser el primer dato que proporciones
Si proporcionas tu dirección de correo electrónico principal de inmediato, es posible que tengas que cambiarla al cabo de un tiempo porque te bombardean con mensajes no solicitados o no deseados. Luego, con más confianza, puedes empezar a dar más información: número de teléfono (preferiblemente móvil), nombre y dónde vives (no la ubicación exacta).
Tu fotografía es quizá el elemento más importante. No hace falta ser un adonis para ser un conquistador de la web.
Con los avances tecnológicos puedes tener tu portafolio fotográfico de calidad, Photoshop siempre ayuda en este objetivo. Elige una imagen que refleje quien eres, sin poses ni disfraces, la autenticidad es lo que la mayoría de la gente busca. Una foto que resalte tu lado bueno, no la del colegio y mucho menos la del carnet de conducir, que son las peores.
Después de establecer todas las formas indirectas de comunicación, espera a que la otra persona te proponga una conversación telefónica
Llegar a este punto es porque definitivamente estás muy interesado y seguro de que puede ser la persona adecuada. Si no quieres que hable contigo, una buena opción es que marques su número de teléfono. Presta atención a quién contesta la llamada y a los ruidos de fondo que escuchas. ¿Coinciden con lo que sabes de la persona?
Finalmente decides conocer a tu romance virtual. Aquí es donde tienes que tener más cuidado
La primera vez, acuerda quedar en un lugar público y si alguien que conoces sabe de la cita, mejor. Lleva suficiente dinero y una forma de comunicarte. No es que la red esté llena de psicóticos, pero es mejor tomar precauciones. Ahora bien, si lo tuyo es el riesgo y el gusto por lo desconocido, adelante.
Lo más importante es que no te confundas. Si sabes lo que quieres, seguro que lo encuentras
No busques sólo sexo, si realmente quieres compañía; no te propongas una relación duradera cuando realmente quieres un revolcón. No aceptes nada que no estés dispuesto a corresponder, así evitarás frustraciones propias y ajenas. Con sentido común y un poco de suerte, tu búsqueda será efectiva.
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