Estabilidad Emocional

Cómo superar un divorcio

Cómo superar un divorcio
Divorciarse de alguien a quien una vez amaste o de alguien a quien todavía amas puede ser devastador. Puede ser como perder un miembro. El divorcio puede significar perder a tu mejor amigo. Puede dejarle confundido sobre el pasado, el presente y el futuro. Puede provocar sentimientos de soledad, desesperación, depresión y autodesprecio. Pero lo peor es que el divorcio puede hacer que a veces actúes como un loco. Puedes comportarte de forma destructiva o irracional. Si permites que el dolor de tu divorcio te domine, podrías acabar perdiendo tu trabajo, tus amigos o tu autoestima.

Cómo superar un divorcio

Borra los recordatorios diarios de tu teléfono y ordenador

Cuando usas tu teléfono móvil a lo largo del día lo último que necesitas es una foto, un correo electrónico o un mensaje de texto que te deprima. Si tienes fotos de tu ex en tu teléfono bórralas para que no las veas accidentalmente cada vez que uses tu teléfono.

Borra también todos los mensajes de texto de tu ex. Si tienes mensajes de texto relacionados con tus hijos, guárdalos y luego borra, borra, borra. Ver su nombre cada vez que escribes un mensaje de texto te va a escocer.

Lo mismo ocurre con los correos electrónicos. Y lo más importante, no te permitas leer los mensajes de tu ex una y otra vez. No intentes analizar lo que realmente querían decir cuando dijeron algo que causó dolor o confusión.

Rumiar cosas así sólo te mantendrá anclado en la ira, la decepción, la confusión y la tristeza. Acepta que no puedes cambiar nada de lo que compartiste con tu ex (bueno o malo) y haz lo que puedas para protegerte ahora. Eso significa tener el menor número posible de recuerdos de ellos.

Mantén una perspectiva saludable

No te dejes llevar por pensamientos catastróficos sobre tu situación. No permitas que los pensamientos que pasan por tu cabeza te hagan caer presa de pensamientos negativos como: "Nada volverá a estar bien", o "Es demasiado tarde para que vuelva a encontrar el amor", o, Dios no lo quiera, "Voy a estar solo el resto de mi vida".

Cuando estés atravesando el proceso de curación, es importante que te recuerdes a ti mismo que debes ganar perspectiva regularmente. Piensa en tu situación en el gran esquema de las cosas. Crea un telón de fondo que te ayude a mantener tus pensamientos realistas y veraces. Piensa en cómo te sentirás sobre esta situación dentro de diez o veinte años.

Piensa en otras ocasiones en las que te has sentido mal por una pérdida o una ruptura y toma nota de cómo te sientes ahora. Reconoce que te has curado antes y que te volverás a curar. Este divorcio no es el fin del mundo. Es simplemente uno de los muchos picos y valles de la vida. Ahora estás sufriendo, pero no lo harás para siempre. La vida continuará.

Cuando estás pasando por un divorcio, es común que te quedes atascado centrándote en lo negativo. Es posible que experimentes ataques de ira y resentimiento intensos. Puede que te encuentres llamando a esto una "relación fallida" o una "pérdida de tiempo". Estos sentimientos son naturales. Por desgracia, dejarse llevar por esta forma de pensar en exceso puede tener efectos adversos. Puede hacer que te sientas mal contigo mismo y con tus perspectivas de futuro.

Pensar en lo negativo puede hacer que sientas que tener una relación con tu ex fue una mala idea y esto podría hacer que no te arriesgues más adelante, cuando estés preparado para buscar una nueva relación.

Los pensamientos negativos pueden hacerte sentir que no eres capaz de tener una relación duradera y estos pensamientos pueden acabar por amargarte, resentirte o hacerte cínico.

Es importante recordar que el hecho de que tu relación no haya durado para siempre no significa que no haya habido aspectos positivos en ella. Los momentos en los que estuvisteis felices, satisfechos e ilusionados son cosas que merece la pena recordar con cariño. Deja de lado lo malo y déjate llevar emocionalmente por lo bueno.

Utiliza el divorcio como punto de partida para el crecimiento personal

Reflexionar sobre tu crecimiento personal es algo muy positivo que puedes sacar de tu experiencia con tu ex. Piensa en lo que aprendiste de tu relación y matrimonio. Piensa en las cosas que aprendiste sobre ti mismo, sobre otras personas y sobre el mundo mismo. Piensa en quién eras antes de tu relación y quién eres ahora.

Vuelve a conocerte a ti mismo

Si te has divorciado después de estar casado durante mucho tiempo, puede que sientas que has perdido el sentido de ti mismo. Estar solo puede ser un gran shock para el sistema después de años o décadas de formar parte de una pareja. Si estás acostumbrado a pasar todas las horas del día con otra persona, puede que te olvides de cómo estar solo y eso puede ser aterrador. Puede que te des cuenta de que gran parte de tu tiempo lo pasas pensando en el mero hecho de que tu ex no está contigo.

Cuando te resulte difícil estar sola, ya sea para asistir a un evento social por tu cuenta o simplemente para prepararte para ir a la cama, recuérdate que estar en una relación no te define. Eres completa con o sin tu ex. Siempre es difícil entrar en una nueva rutina, independientemente de las circunstancias que haya detrás, y es normal sentirse asustado, confundido o desganado en estas situaciones.

Céntrate en las cosas que te gustan y empieza a recordar quién eres realmente por ti misma. No te castigues si no estás seguro de por dónde empezar o si te sientes arrollado por el cambio repentino. No seas tan duro contigo mismo.

Vídeos de Cómo superar un divorcio

Contenido

Entradas Relacionadas